
El rey quedo tan maravillado que decidió pedirle algo grande y llamándolo le dijo: ahora he visto que todo logras debes traerme pues algo que cuando este triste me contente y algo que cuando este alegre me entristezca de este modo salio el siervo y anduvo mucho sin lograr nada así que decidió volver y sentado a la entrada de su ciudad empezó a llorar. Había allí un niño que jugaba con unas maderitas en el piso y mirándolo le pregunto el por que de su llanto. El hombre decidió contárselo y el niño le dijo no se preocupe, tome esto y le dio un palito; el hombre miro la escritura que había en el y su rostro estallo de alegría, así que agradeciendo al niño entro al reino donde encontró al rey feliz contando el dinero de los tributos del pueblo y le dijo rey traje lo que me pidió el rey dijo: ha si; ¿y que me trajiste hoy?; enseguida el siervo dio la maderita escrita al rey el cual después de leerla se rompió en llanto.... Los que estaban con el rey se acercaron a leer también y no entendieron el por que del llanto pues la madera solo decía: "esto también pasara"...
(No os afanéis por el día de mañana...Mateo 6:34)
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